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Foto del escritorvictoriadaboise

Victoria Daboise presenta sus novelas en El Albir

Comenzaba el artículo anterior con expresa mención a este séptimo mes año, a este julio que, aunque hijo de un año par, me ha regalado momentos únicos.


Lo demuestra la imagen que ilustra estas líneas.


Allí, en mi playa, en el escenario de mis libros, durante un evento único: La Presentación de mis dos títulos publicados junto al mar que los inspira.


Pareciese un exvoto antiguo, como el propio de ofrendar a un dios del infinito azul, las dádivas que merece a cambio de su inspiración.


Suspiro de nuevo.


Se trataba de un encuentro que comenzó a fraguarse con la publicación, el verano anterior, de "La casa de las glicinias". Sin pompa ni algarabía, entonces la presenté allí, ante amigos y familiares, más en una tertulia entre personas de mi confianza que en una convocatoria oficial.


Tras entablar contacto con las autoridades de L'Alfàs Del Pi, municipio al que pertenece mi Albir, acordamos programar un acontecimiento formal que pusiera en valor la belleza e innumerables cualidades de esta playa única donde sitúo el eje central de ambas obras.


Con motivo de la inauguración de la nueva Biblioteca frente al mar, aquella con la que sueño que, en mi vejez -si llegase- sería bibliotecaria voluntaria, desplegaron mis pétalos, mis páginas y mis sueños.


Acompañada por Luis Morant, Concejal del Excelentísimo Ayuntamiento, él recorrió con brevedad mi biografía y méritos académicos -aprecié que lo hiciese de forma escueta- y se extendió a la hora de relatar el protagonismo del lugar en mis novelas.


De esa pequeña costa rocosa que los mapas, de forma errónea, sitúan bajo la Serra Gelada, pues lo cierto es que la cartografía debería ubicarla en el mismísimo centro de mis entrañas.


Sucede pocas veces en la vida. Es más, algunas personas no llegan a conocer jamás la conexión. Sin embargo, cuando se da, es inquebrantable. Así me siento unida a L'Albir.


Será eterna mi gratitud por aquel reconocimiento. Por su afecto y consideración.


Fue la tarde del diecinueve de julio, justo el día en el que "Desde el faro de la genista" cumplía tres meses.


Semanas antes comenzó mi travesía por este séptimo mes.


Cada lunes por la tarde, como presentadora -y parte del grupo de autores y autoras- en las Lecturas de la Librería Vuelo de Palabras. Qué fantástico grupo de personas ha reunido su librera. Qué hermoso ha sido conocernos, compartir, apoyarnos y disfrutar de nuestro común amor por los libros.


Allí mismo, en Vuelo de Palabras, he realizado -y realizo- mis dinámicas para escritores y escritoras que necesitasen ayuda en el proceso de construcción de sus obras. ¡Qué enriquecedor! Es una tarea que me aporta muchas satisfacciones. Compartir aquello que he aprendido con tanta ilusión es... ¿Magia? Algo así.


Y los miércoles... ¡Le pongo voz a las tardes! Conduzco el espacio "Victoria y Los Libros", en ONDAB Radio, que ya nos ha llevado a:


Celebrar el aniversario de Mercader, un Cabanyal de novela. (Escúchalo aquí)


Darnos un Vuelo de Palabras, desde la Poesía de Paula Martín. (Escúchalo aquí)


Degustar el Mosaic de Meliana, un restaurante con platos muy literarios. (Escúchalo aquí)


Disfrutar de una tarde en Café Bastard, con la Bookstagrammer @asterope_books. (Escúchalo aquí)


Compartir una tertulia con la librera de la Playa de Alcossebre y sus lectoras. (Escúchalo aquí)


Gracias a todas las personas que han hecho posible cada programa. ¡Y los que nos quedan!


En este navegar, mi travesía, durante el mes de julio, también ha propiciado que presentase "Desde el faro de la genista" en Altura, (donde su Consistorio volcó todos medios para recibirnos en la magnífica Iglesia Primitiva de la localidad), en la Librería Vuelo de Palabras -junto a los historiadores y artistas Jesús Poveda y Estela Palmí- y en la Feria del Libro y la Cultura de la Villa del Toro, visita obligada cada verano.


Sí, ha sido un mes de julio extraordinario. Acompasado de recompensas, personales y profesionales. Sabéis que soy transparente al hablaros de unas y otras.


Como suele decir mi madre -es una cita que he utilizado como referente-, "cayeron las hojas y, a la vista de todo el mundo, quedaron los nidos".


Agosto promete magníficas noticias. Con la presentación "Desde el faro de la genista" en la Feria del Libro de Benavente y la dedicación de ejemplares en la caseta de "La Librería de Ángela", estrenaré un mes con varias paradas clave en mi hoja de ruta.


Y de septiembre... ¡Qué gran noticia os daré para septiembre!


Gracias por estar ahí. Siempre.

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